Triunfo histórico de Argentina en el Maracaná marcado por incidentes fuera del campo

La victoria albiceleste, la primera de Brasil como local en Eliminatorias, se ve empañada por la represión policial a los hinchas argentinos.

En un enfrentamiento que quedará grabado en la memoria colectiva del fútbol argentino, la selección nacional logró un triunfo histórico en el estadio Maracaná, al imponerse 1-0 a Brasil en un partido de las Eliminatorias mundialistas. El héroe inesperado de la noche fue Nicolás Otamendi, quien marcó el único gol del encuentro con un certero cabezazo.

Sin embargo, la hazaña deportiva estuvo eclipsada por un incidente fuera del campo que dejó a todos boquiabiertos. El encuentro fue demorado durante 27 minutos debido a la represión policial a los hinchas argentinos, que generó caos en las gradas. Los jugadores albicelestes, en un gesto solidario, abandonaron el terreno de juego para proteger a la afición y se dirigieron al vestuario con la firme intención de suspender el juego si las agresiones no cesaban.

Tensión en el estadio

La tensión en el estadio alcanzó su punto álgido cuando las fuerzas de seguridad intervinieron para controlar a los seguidores argentinos, generando momentos de incertidumbre y preocupación. Los jugadores de ambas selecciones observaron con consternación desde el campo mientras los acontecimientos se desarrollaban fuera de su control.

Finalmente, tras la intervención de las autoridades y un acuerdo entre los capitanes de ambas selecciones, el juego se reanudó. La determinación de los jugadores argentinos para proteger a sus aficionados y la capacidad de concentración demostrada al regresar al campo después de la interrupción, añadieron un matiz adicional a la gesta deportiva.

El gol de Otamendi, celebrado con euforia por los jugadores y los seguidores presentes, selló la victoria histórica para Argentina en territorio brasileño.