Etiquetado frontal en disputa: Cámaras empresariales advierten riesgos de regulaciones distintas en la región

El debate sobre el etiquetado frontal de alimentos en Centroamérica se intensifica ante el avance de diferentes propuestas legislativas en cada país, lo que ha encendido las alarmas en el sector empresarial por el posible impacto en el comercio regional.

A excepción de Nicaragua, en todos los países centroamericanos existen iniciativas en discusión para definir un modelo de etiquetado.

Sin embargo, estas propuestas no están homologadas, lo que podría generar la necesidad de múltiples etiquetas para un mismo producto y aumentar los costos de operación de las empresas exportadoras.

El impacto para Guatemala

La Cámara Guatemalteca de Alimentos y Bebidas (CGAB) y la Federación de Cámaras de Comercio del Istmo Centroamericano (FECAMCO) señalaron que la fragmentación normativa afectaría directamente al comercio intrarregional.

“Las etiquetas que se usarán en Guatemala serían diferentes a las de El Salvador, Honduras, Costa Rica e incluso Panamá”, explicó Leonel Tayés, asesor legal de la CGAB.

Según datos del gremio, el sector de alimentos y bebidas de Guatemala se convirtió en el principal exportador del país en el segundo semestre de 2024, con más de 2,000 millones de dólares en ventas, de las cuales el 50% tuvo como destino el mercado centroamericano.

Antecedentes del reglamento regional

La discusión no es nueva. Desde 2019, el Consejo de Ministros de Salud de Centroamérica y República Dominicana (COMISCA) aprobó una resolución que impulsaba un Reglamento Técnico Centroamericano de Etiquetado Frontal de Advertencia Nutricional (RTCA-EFAN).

Incluso, el Instituto de Nutrición de Centro América y Panamá (INCAP) elaboró un estudio de percepción sobre el etiquetado frontal en varios países.

En Guatemala, la investigación incluyó a 356 personas de comunidades urbanas y rurales, y concluyó que el uso de estos sellos aumenta significativamente la intención de compra de productos más saludables.

Guatemala y Costa Rica con propuestas distintas

Actualmente, dos propuestas concentran el debate regional:

• Guatemala propone un modelo basado en octágonos negros, alineado con recomendaciones de la OMS, que abarca seis nutrientes críticos.
• Costa Rica, en cambio, impulsa un sistema con lupas que identifican únicamente tres nutrientes.

Edgar González, viceministro de Regulación, Vigilancia y Control de la Salud, explicó que ambas propuestas están siendo analizadas en el marco de la COMISCA y el COMIECO, pero alcanzar un consenso llevará tiempo.

Postura del sector privado

Enrique Font, presidente de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG), destacó que desde junio de 2025 iniciaron las negociaciones formales en reuniones del COMIECO, con el objetivo de avanzar hacia un documento consensuado.

“Un mecanismo regional ofrece certeza jurídica, simplificación de procesos y reducción de costos para las empresas”, señaló Font.

El gremio enfatiza la importancia de que la normativa combine el objetivo de informar al consumidor y proteger la salud pública, con la necesidad de garantizar competitividad y estabilidad para las industrias que exportan en la región.

El rol del Ministerio de Salud

Por su parte, el ministro de Salud, Joaquín Barnoya, recordó que la cartera impulsa desde hace seis meses una campaña para reducir el consumo de productos ultraprocesados, vinculados a enfermedades crónicas como cáncer, diabetes y males cardíacos.

“El uso de octágonos es lo más efectivo y es lo que apoyamos como Ministerio”, puntualizó Barnoya, aunque aclaró que la decisión final dependerá de la discusión legislativa y regional.