Mundo
Asesor financiero enfrenta 116 cargos por torturar y violar a mujeres
Las autoridades han señalado que el acusado utilizó su posición de poder, su conocimiento legal como abogado y su riqueza para coaccionar y silenciar a las víctimas.

Un apartamento ubicado cerca del Empire State Building, en el corazón de Manhattan, se convirtió en el escenario de una serie de crímenes que los fiscales han calificado como actos de “grotesca violencia sexual”.
Según informó The Associated Press, el acusado, Ryan Hemphill, un ejecutivo de capital privado de 43 años, enfrenta 116 cargos relacionados con agresión sexual depredadora, tortura y otros delitos cometidos contra al menos seis mujeres en un periodo de cinco meses.
Entre los métodos de tortura descritos se incluyen golpes, asfixia, descargas eléctricas con una picana y el uso de un collar de descargas eléctricas.
Además, se le acusa de haber encadenado a una de las víctimas a una cama durante horas, ignorando sus súplicas de liberación.
Según la fiscal adjunta de distrito de Manhattan, Mirah Curzer, las seis víctimas identificadas podrían ser solo una fracción del total, ya que las investigaciones han revelado imágenes de docenas, posiblemente cientos, de otras mujeres en situaciones similares.
El modus operandi de Hemphill, según detallaron los fiscales, consistía en contactar a mujeres a través de sitios web, incluidos aquellos especializados en relaciones de “sugar daddy”, donde hombres adinerados buscan parejas románticas.
En estos encuentros, el acusado ofrecía grandes sumas de dinero a cambio de sexo y compañía, aunque en algunos casos no cumplía con los pagos o entregaba dinero falso.
Una vez que ganaba la confianza de las mujeres, las persuadía para que le compartieran detalles de traumas sexuales pasados, los cuales luego recreaba deliberadamente durante las agresiones.
Además, Hemphill utilizaba sustancias para incapacitar a las víctimas, empleaba esposas y restricciones físicas, y envolvía sus cabezas y rostros con cinta adhesiva.
Según los fiscales, el acusado cruzaba límites que las mujeres habían establecido claramente, aprovechándose de su inexperiencia o vulnerabilidad.
Durante la investigación, las autoridades encontraron en el apartamento de Hemphill un arsenal de pruebas que refuerzan las acusaciones.
Según The Associated Press, el lugar estaba equipado con múltiples cámaras de vigilancia que capturaron imágenes de las agresiones. También se hallaron cientos de balas, cargadores de alta capacidad y una gran cantidad de drogas, incluyendo heroína, cocaína, anfetaminas y fentanilo.
Estas evidencias, junto con los testimonios de las víctimas, han sido fundamentales para sustentar los cargos presentados en su contra.
También obligó a algunas mujeres a grabar videos en los que afirmaban haber consentido los abusos, en un esfuerzo por protegerse de posibles repercusiones legales.
El caso actual no es el primer enfrentamiento de Hemphill con la justicia.
Sin embargo, los fiscales consideran que este antecedente, junto con las pruebas actuales, refuerzan la imagen de un patrón de comportamiento depredador.
“El desequilibrio de poder en sus actos depredadores es evidente”, declaró Bragg, quien también enfatizó que el acusado se equivocó al creer que era “intocable”.
A pesar de declararse inocente, la jueza Ann E. Scherzer ordenó que permaneciera encarcelado sin derecho a fianza, argumentando que su riqueza, conexiones y antecedentes de filantropía podrían facilitar su fuga del país.
La jueza también señaló que el patrón de hechos descrito por los fiscales, incluidos los intentos de intimidar a testigos, justificaba esta medida.
Según Scherzer, el comportamiento del acusado demuestra hasta qué punto estaría dispuesto a llegar para evitar enfrentar los cargos en su contra. Si es declarado culpable, Hemphill podría enfrentar una sentencia de cadena perpetua.
Via: infobae