Mundo
Buques de guerra rusos llegan a Cuba en nuevo viaje
El Departamento de Estado de Estados Unidos y el Pentágono no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios sobre el tema. Este es el segundo viaje de un destacamento naval ruso al país caribeño en un mes y medio.
El buque escuela Smólny y el patrullero Neustrahimiy, así como el petrolero Yelnya, forman parte de la flota procedente de Rusia, cuya permanencia en la capital cubana se extenderá hasta el martes, según del Ministerio de Defensa. El Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias dijo que la visita es de rutina y que los marinos rusos se entrevistarán con el jefe de la Armada de Cuba.
El sábado por la mañana, autoridades cubanas lanzaron salvas al aire para dar la bienvenida a la flotilla rusa. También un grupo de residentes rusos en La Habana observaba el acontecimiento. Ana Garcés, una jubilada de 78 años, dijo a Reuters que recordaba que la entonces Unión Soviética fue el único país que ayudó a Cuba durante la crisis de los misiles cubanos de 1962, el pico de las tensiones con Washington cuando el mundo se tambaleaba al borde de una guerra nuclear.
«Estamos muy agradecidos», dijo en alusión a la visita de los barcos rusos. «¿Por qué no lo vamos a recibir con los brazos abiertos? esto es amistad. Aquí han entrado todo tipo de barcos», agregó. Su esposo, el también jubilado Rolando Pérez, de 71 años, mirando el desplazamiento de los buques dijo: «Esto demuestra cómo otros países nos apoyan y le quita un poco de la mentalidad mundial a nuestro país».
El 12 de junio atracó en el puerto de La Habana una flota de la Marina de Guerra rusa formada por la fragata Gorshkov, el submarino de propulsión nuclear Kazan, el petrolero Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chiker, una visita que acaparó la atención de simpatizantes y detractores.
Washington y La Habana dijeron en aquel momento que los buques rusos en la isla no representaban una amenaza para la región. La Habana está situada a sólo unos 150 kilómetros de Cayo Hueso, en Florida, donde está enclavada una Estación Aérea Naval de Estados Unidos y viajes de esta naturaleza son observados con detenimiento por Washington.
Moscú y La Habana han reforzado sus contactos de alto nivel. El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ha visitado Rusia cuatro veces. Y Moscú ha enviado a La Habana petróleo, harina, una mayor cifra de turistas en momentos de su peor crisis económica con escasez de alimentos y medicinas, mientras los cubanos sufren cortes de energía, elevada inflación y las sanciones comerciales de Estados Unidos.
Via: americano media