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Colombianos exigen la renuncia de Iván Velásquez por inacción ante el secuestro de 79 policías y el asesinato de un agente
El jueves 2 de marzo fueron liberados los 78 elementos de la Policía Nacional de Colombia que habían sido secuestrados por la guardia campesina del sector de Los Pozos, San Vicente del Caguán.
Luz María Múnera Medina, representante a la Cámara por Antioquía, dijo que “la realidad es que el gobierno del presidente Gustavo Petro liberó a 78 policías sin pegar un solo tiro” para el programa Voces de RCN. Esta cita fue publicada por el periodista Juan Carlos Iragorri en Twitter, donde los usuarios de dicha red social comenzaron a manifestarse contra la administración de Petro.
Más de 40 días llevaba la manifestación de la comunidad de la zona, en reclamo de la pavimentación de 42 kilómetros de vías e inversiones en el sector de Los Pozos, ubicado en San Vicente del Caguán, donde opera la empresa petrolera Emerald Energy.
Los involucrados señalaban que dicho proyecto, así como la petrolera, no ha creado desarrollo al lugar.
En la madrugada del jueves 2 de marzo, en medio de enfrentamientos entre los grupos indígenas y campesinos contra los agentes antimotines de la policía.
Las palabras de la representante de Cámara no concuerdan con un comunicado extendido por el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, señalando que han hecho seguimiento a las protestas y en la madrugada se habría: “lanzado bombas molotov y quemaron las instalaciones de la misma (petrolera), lo que causó enfrentamientos entre parte de la comunidad y las autoridades de policía y militares”. En otras palabras, sí hubo más que disparos, pero no fueron efectivos.
El secuestro de los policías se anunció por medio del alcalde del municipio de San Vicente del Caguán, Julián Perdomo, en sus declaraciones a medios de comunicación regionales, el funcionario indicó:
“La guardia campesina ingresó a las instalaciones de Emerald Energy, donde desafortunadamente, se presentó una confrontación, donde lastimosamente una persona de la Policía perdió la vida y también falleció una persona de la comunidad campesina. Tenemos cuatro heridos. Esto nos llevó a instalar un PMU, con el Gobierno Nacional, para darle solución a esta situación”.
El policía asesinado fue identificado como Ricardo Arley Monroy Prieto, de 39 años de edad, quien en el momento del ataque con arma blanca realizaba labores de contención de la protesta.
Según afirmó la secretaria de Gobierno de San Vicente del Caguán, Sandra Rodríguez Pretelt, a Blu Radio, “el uniformado murió por una puñalada que recibió en el cuello, mientras que el deceso del campesino fue causado con arma de fuego”.
Tras la liberación, Gustavo Petro asegura que el operativo para recuperar a los agentes fue:
“Gracias a las gestiones del ministro de defensa y del interior han sido liberados todos los miembros de la policía y los funcionarios de la petrolera retenidos en San Vicente del Caguán, Caqueta”.
No obstante, los colombianos no opinan lo mismo. Mientras Petro se dedicaba a señalar la política de seguridad a Nayid Bukele, vía Twitter. Los colombianos exigían acciones concretas y prontas para ayudar a los elementos al frente del conflicto.
La Fiscalía tiene las fotografías de los participantes de las manifestaciones y buscará determinar quiénes son los responsables de las dos muertes.
El organismo judicial advirtió que abrió una investigación para establecer las circunstancias de modo, tiempo y lugar que derivaron las muertes y el secuestro de 78 uniformados.
Paralelamente, el ente acusador revisará los audios que fueron enviados por los mismos uniformados minutos antes de los fallecimientos y donde rogaban por apoyo a sus superiores.
En ese sentido, se indaga en la responsabilidad que tendrían esos mandos en la omisión de socorro.
Entre ellos, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, quien se apareció en el lugar luego que estallará el caos y ya hubiese dos fallecidos.
Según usuarios de redes sociales, la situación del paro de campesinos no tuvo que escalar en esa magnitud. También, se habla de la incidencia de las FAR en los grupos campesinos, al punto de instrumentalizarlos.
Mientras tanto, el ministro del Interior, respalda la narrativa que lo hecho por los manifestantes fue un “Cerco Humanitario”. Nuevamente, los colombianos no coinciden con tal idea de los funcionarios de Petro.
Según el profesor universitario y exsecretario de Transparencia, Gabriel Cifuentes, el secuestro de los policías se tiene que como un hecho y los responsables deben responder por tal delito.