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Más de un millar de personas ante la tumba del opositor Navalni en Rusia
En un día de temperaturas glaciales, decenas de familias con niños se reunieron en el lugar, donde se desplegó un dispositivo de seguridad con policías de civil.
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Al menos 1,500 personas acudieron al cementerio de Borísovskoye, en Moscú, donde está enterrado Navalni. A principios de la tarde, formaban una larga fila según periodistas de AFP. En un breve discurso la madre del opositor dijo que desea que los responsables de su “asesinato” sean “castigados”.
“Todo el mundo sabe quién lo ordenó. Pero queremos saber quién lo llevó a cabo, quién permitió que sucediera y quién lo hizo”, dijo Lyudmila Navalnaya, conteniendo las lágrimas detrás de unas gafas oscuras.
Anna, una psicóloga infantil de 63 años, dijo llorando que no esperaba “ver a tanta gente”, en un contexto en el que, según ella “el miedo está presente en todas las casas”.
Varios diplomáticos occidentales, entre ellos de Estados Unidos, Reino Unido, España, Noruega y la Unión Europea, también se sumaron al homenaje. La pérdida de su figura más connotada, las luchas internas y la agravada represión en Rusia dejaron a la oposición en una posición de especial debilidad, aunque distintos dirigentes exiliados intentan reavivar la llama de la lucha contra el presidente Vladimir Putin.
Mencionar su nombre o el de su organización, el Fondo de Lucha contra la Corrupción (FBK), sin especificar este estatus de “extremista” expone a los infractores a duras penas.
Su viuda, Yulia Navalnaya, que asumió el relevo de su movimiento, participó en una conmemoración en Berlín, donde viven muchos de sus partidarios. Navalnaya, declarada “extremista” por las autoridades, llamó a los rusos en el exterior que salgan a las calles a protestar en nombre de quienes no pueden hacerlo en su país.
“Debemos salir (a protestar) en nombre de las personas en Rusia que no pueden”, dijo en un homenaje en una iglesia de Berlín. Navalnaya agradeció también a los simpatizantes de su marido que, pese al riesgo de represalias, lo homenajearon en Rusia. “La gente que sale en una situación así es muy valiente y estoy muy agradecida”, declaró.
El jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, fue uno de los primeros dirigentes occidentales en rendir homenaje al opositor, fallecido “porque luchó por la democracia y la libertad en Rusia”. “Navalni dio su vida por una Rusia libre y democrática”, reiteró por su parte la jefa de la diplomacia de la UE, Kaja Kallas.
En Rusia, varios canales de Telegram favorables al Kremlin advirtieron a los seguidores de Navalni de no acudir al cementerio. El texto aseguraba que hay un “Gran Hermano y su ojo que siempre está vigilando” y adjuntó la fotografía de un cartel que indica que hay cámaras de vigilancia en las puertas del lugar.
Las autoridades rusas han desarticulado metódicamente el movimiento de Navalni y varios de sus partidarios están en prisión.
Las autoridades rusas afirman que falleció mientras caminaba por el patio de la prisión.
La oposición rusa, reprimida en el país, intenta reactivar el movimiento en el extranjero, sin mucho éxito hasta ahora.
Yulia Navalnaya y otras dos importantes figuras de la oposición organizaron en noviembre una marcha en Berlín contra Putin y su ofensiva en Ucrania, que reunió cerca de 2,000 personas. Además, varios escándalos dentro del movimiento lo han debilitado, provocando la frustración de una parte de sus militantes.
Via: afp