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Huevos de Pascua: tradición que celebra la vida y resurrección
Cada vez más hogares guatemaltecos adoptan esta práctica lúdica que se realiza el Domingo de Resurrección, simbolizando la nueva vida y la alegría de la Pascua.

En el corazón de las tradiciones de Semana Santa en Guatemala —donde abundan las procesiones solemnes, las alfombras de aserrín y la devoción religiosa— una costumbre más reciente pero cada vez más presente empieza a florecer en escuelas, hogares y espacios comunitarios: la entrega y decoración de los huevos de Pascua.
La tradición marca que los huevos se entregan o se encuentran el Domingo de Resurrección, también conocido como Domingo de Pascua, que este 2025 se celebra el 20 de abril. Es el día que conmemora la victoria de Cristo sobre la muerte y el renacer de la esperanza.
La práctica más común es que los adultos —especialmente padres o maestros— escondan huevos decorados o de chocolate en jardines, parques o dentro del hogar. Luego, los niños salen a buscar “el tesoro”, en lo que se conoce como “cacería de huevos de Pascua” (Easter Egg Hunt).
También se organizan talleres donde los niños pintan huevos hervidos o de madera con colores brillantes, mensajes de fe, flores, cruces y otros símbolos.
Aunque no es una tradición ancestral en el país, los huevos de Pascua están ganando aceptación en Guatemala por su enfoque educativo, recreativo y espiritual, adaptándose a los valores familiares y comunitarios de una manera respetuosa y significativa.