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Trasladan a líderes de pandillas a prisión de máxima seguridad
Gobierno traslada a líderes del Barrio 18 y la MS a cárcel de máxima seguridad Renovación 1.

En un operativo calificado como “preciso e implacable”, el Ministerio de Gobernación de Guatemala confirmó el traslado de los máximos líderes del Barrio 18 y la Mara Salvatrucha (MS) al Centro de Detención de Máxima Seguridad Renovación 1, una prisión de alta seguridad ubicada en el municipio de Fraijanes.
El traslado fue realizado durante la noche del miércoles 30 de julio y estuvo a cargo de la Fuerza Élite del Sistema Penitenciario, con el respaldo de más de 800 elementos de las Fuerzas Especiales de la Policía Nacional Civil (PNC), según lo anunció el ministro del Interior, Francisco Jiménez, a través de su cuenta oficial en la red social X (antes Twitter).
“No hubo heridos. No se disparó una sola bala. Y aunque intentaron oponerse, rápidamente descubrieron que no tenían otra alternativa que entregarse”, declaró Jiménez en su publicación.
El ministro calificó a los diez trasladados como “criminales de altísima peligrosidad”, asegurando que durante años gozaron de protección o impunidad bajo anteriores administraciones. Según explicó, todos quedaron ahora bajo un régimen de aislamiento total, sin contacto externo ni capacidad para coordinar actividades ilícitas desde prisión.
Nombres de los reos trasladados
Gobernación detalló que los cabecillas trasladados son cinco líderes del Barrio 18 y cinco de la Mara Salvatrucha:
Barrio 18
- Aldo Duppie Ochoa Mejía, alias El Lobo
- Wilder Rodríguez Aguilar, alias El Pato
- Mayro De León Hernández, alias Viejo Zacapa
- Jarvin Leonel Itzoy Cruz, alias El Crazy
- Manuel de Jesús Rivas Granados, alias El Drimer.
Mara Salvatrucha
- Jorge Jair de León Hernández, alias El Diabólico
- Amílcar Galileo Torres Rosales, alias El Garrobo
- Nixon Bantes González, alias El Flaco
- Ronal Bosbeli Choc Alemán, alias El Sexy Boy
- Ángel Gabriel Reyes Marroquín, alias El White.
“El objetivo principal es cortar toda forma de comunicación y dirección delictiva desde dentro de las cárceles”, indicó el titular de Gobernación, quien reiteró que estos cabecillas estarán ahora sometidos a vigilancia permanente y sin acceso a teléfonos, visitas no autorizadas o privilegios especiales.