Negocios y Tecnología
Mujeres que transforman: Emprendimientofemenino y agricultura regenerativa en Guatemala
representante de Mujer Emprendedora Guatemalteca (MEG), y Lola Molina, fundadora de Granja de Lola, compartieron sus experiencias y visiones sobre el impacto del emprendimiento femenino
En una entrevista especial realizada de manera virtual, Michelle Moll, representante de Mujer Emprendedora Guatemalteca (MEG), y Lola Molina, fundadora de Granja de Lola, compartieron sus experiencias y visiones sobre el impacto del emprendimiento femenino y la importancia de la agricultura regenerativa en el país.
El impacto del emprendimiento femenino
Michelle Moll subrayó que el aporte de las mujeres emprendedoras es invaluable, no solo para sus familias, sino también para la sociedad y la economía nacional. Desde MEG, se busca crear espacios que motiven a más mujeres a tomar decisiones emprendedoras, ya sea liderando sus propios negocios o como intrapreneurs dentro de corporaciones.
La organización reconoce cada año a mujeres que han generado impacto en diversas industrias. Entre ellas destacan Lorena Arathoon, creadora de Tazu Chips, y Marcela Tánchez, primera guatemalteca con productos aprobados por la FDA (Food and Drug Administration de Estados Unidos), ambas con presencia internacional.
El valor de la red MEG
Michelle compartió su experiencia como ganadora del reconocimiento Emprendedora del Año 2023, resaltando que MEG ofrece un ecosistema único. Reuniones mensuales con especialistas en temas legales, storytelling y desarrollo personal, donde las participantes pueden mostrarse vulnerables, compartir experiencias y recibir consejos prácticos.
“El principal obstáculo que debemos superar es creer en nosotras mismas y silenciar las dudas internas”, afirmó Moll, destacando que el compromiso de cada emprendedora es clave para fortalecer el movimiento.
Agricultura regenerativa: volver al origen
Por su parte, Lola Molina explicó que la agricultura regenerativa significa respeto a la naturaleza, alimentación consciente y enfoque en la salud humana. Con formación en zootecnia, enfrentó una crisis al reconocer que los métodos convencionales no eran sostenibles económicamente, lo que la llevó a replantear su modelo productivo.
Su filosofía se centra en producir alimentos que ella misma daría a sus hijos, priorizando el bienestar animal y la salud humana. En Granja de Lola trabaja bajo los tres pilares de sostenibilidad: económico, ambiental y social, siendo este último el más olvidado en la agricultura tradicional.
Una visión compartida de futuro
Lola enfatizó que su meta no es crecer sola, sino que su modelo de agricultura regenerativa se replique en otras tierras de Guatemala, recuperando suelos y generando conciencia en los consumidores sobre la calidad de los alimentos.
Michelle y Lola coincidieron en que la colaboración entre hombres y mujeres es fundamental para lograr un cambio significativo en el país. La entrevista concluyó destacando la importancia de estos espacios para clarificar ideas y fortalecer el camino emprendedor. Las participantes valoraron la oportunidad de compartir sus experiencias y amplificar su mensaje, reafirmando que el diálogo y la colaboración son esenciales para construir un futuro más sostenible e inclusivo.




