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Injerencia homosexual en la educación escolar en Guatemala
no es aceptada

En Guatemala, desde el 12 de julio de 2021, el tema ha cobrado de nuevo interés público. En los Estados Unidos de América, un año después, en el 2022. Empero, en la historia de la humanidad como fenómeno o realidad social, ha estado presente en distintas épocas, culturas, razas, condiciones sociales y políticas.
Actualmente y debido a que la Organización de Naciones Unidas, ONU, y toda su estructura de programas ha dado lugar y sitial en su Agenda 2030, bajo la figura de inclusión al tema de la Disforia de Género, no en pocos países crece la histórica disputa entre sectores identificados como conservadores o tradicionalistas y la COMUNIDAD LGTB.
El punto de inflexión lo representan los programas, políticas e incluso, normas en algunos países bajo tutela de la ONU, de impulsar acciones entre las nuevas generaciones de personas menores de edad en época escolar temprana, a través de la estructura educativa pública con semiótica y la semiología, para la favorecer “cuadros de costumbres y estereotipos” de las personas que pertenecen al mundo LGTB.
J. Gordon Muir, M.D., urólogo de profesión y origen inglés, externó a través de una publicación titulada Debate Points: Homosexuality in World History , en el Wall Street Journal, que “la cuestión de la homosexualidad debe mantenerse fuera de las escuelas, totalmente”.
“La única razón para introducir relatos especulativos, no probados sobre la vida sexual, es el usarlos como instrumentos para predicar la aceptación de la homosexualidad, la cual se enseña a niños impresionables -susceptibles de ser influenciados, manipulados por estar en edad temprana- y si los padres quieren enseñar a sus niños que la homosexualidad está bien, que lo hagan en su casa”.
J. Gordon Muir
“Los padres que opinan lo contrario, tienen el derecho de mandar a los niños a la escuela sin el temor de que sus impuestos sean usados para lavarles el cerebro, infundiéndoles ideas completamente opuestas a las más profundas convicciones familiares. No debemos ser forzados por nuestro gobierno –Estados Unidos de América-, nuestras escuelas, nuestras leyes y aún el uso de nuestro propio dinero, pagado en impuestos, a reafirmar a un grupo así”, exteriorizó Muir.


La batalla en Guatemala
El 12 de julio de 2021, un grupo de diputados del Congreso de la República de Guatemala, presentó la iniciativa 5940 en busca que sea aprobada bajo el título: “Ley para Garantizar la Protección Integral de la Niñez y Adolescencia contra Trastornos de la Identidad de Género”.
Sus ponentes buscan “garantizar a las niñas, niños y adolescentes el derecho a tener su identidad según su sexo al nacer” y evitar que sean expuestos a material “que promueva o muestre variaciones de la identidad del sexo de nacimiento o reasignación de género¨.
En el cuerpo jurídico-político de la iniciativa, se califica como “un trastorno” la identidad de género, una expresión de conducta diferente al sexo de nacimiento, pues los niños, las niñas y adolescentes, tienen derecho a “que no sea vulnerada su identidad según su género sexual al nacer” y que se les proteja de contenidos que induzcan, confundan o influyan a lo contrario.
Con los artículos 1 y 2 de esta iniciativa, buscan modificar los artículos 14 y 59 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia; mientras que los artículos 4 y 5 pretenden se elaboren programas de educación sexual que incluyan la “disconformidad de género” y la “reasignación de género”, en clara intención contra el 76 de la referida ley, y el 2 de la Ley de Educación Nacional.
El artículo 6 de dicha propuesta de iniciativa, buscan se apruebe la prohibición de “la difusión de materiales impresos o digitales referentes a la ideología de género en instituciones educativas dependientes” del Ministerio de Educación.
Dicha iniciativa no ha tenido el avance deseado de sus interponentes. Solo la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología ha emitido un dictamen a su favor el 7 de diciembre de 2021, mientras que la de Derechos Humanos y la de Gobernación, no se han pronunciado aún al respecto.
La Comisión argumentó por mayoría que la iniciativa podría “mejorar los mecanismos para brindar protección a los derechos de los niñas y adolescentes respecto a su auto identidad, según su sexo al nacer”.
Investigación Littman
Por aparte y en los Estados Unidos de América, existe un estudio de investigación que tuvo como grupo objetivo en 2018, la opinión de 256 padres de familia cuyos hijos presentaban disforia de género de inicio rápido. El 82,8% de los sujetos eran niñas, y fue realizada por la Dra. Lisa Littman, Presidente del Instituto para la Investigación Integral de la Disforia de Género, ICGDR.
La Disforia de Género es un vocablo científico con el que el Dr. John Money, identificó para el campo de la siquiatría en 1973 la llamada DIVERSIDAD SEXUAL, y desplazó al de la transexualidad, en vigencia desde 20 años antes, en 1953, por su colega Harry Benjamín.
Clínicamente, en el campo de la sicología y la siquiatría, la Disforia de Género (ausencia de Identidad de Género) al decir de sus defensores, es un término que permite integrar la clasificación de 135 tipos los cuales en otro término intermedio, el de transgénero, no era posible.
La Identidad de Género se refiere al cómo se siente e identifica la persona a nivel cognoscitivo, frente a la sexualidad biológica con que fue concebido. Puede ser un hombre que se siente mujer, una mujer que se siente hombre o ambos.
Para el género biológico y base del movimiento conservador actual, es el que trae el ser desde su concepción y desarrollo en la matriz de la madre, con base a sus órganos genitales, lo cual rige la construcción social de un sistema binario de dos géneros: masculino – femenino.
Así se da vida al término CISGÉNERO, el cual integra al de la IDENTIDAD y el GÉNERO. Sustentado en la biología, la anatomía y los cromosomas, este constituye la IDENTIDAD, que es lo mismo a si el ser nació hombre, se siente y disfruta ser hombre e igualmente, en el caso de la mujer, se siente y disfruta ser mujer; en ambos casos son cisgéneros, y no se les dificulta acoplarse al conjunto de expectativas, estándares y creencias sociales imperantes.
Por el contrario, TRANSGÉNERO es el ser que se identifica con un género distinto al biológico que se formó desde su concepción. Es decir, hombre que se siente mujer, mujer que se siente hombre y que, cómo comunidad, tienen una alta tasa de problemas de salud mental.
La construcción de la identidad de género, el ser hombre o mujer, es un proceso complejo que involucra factores biológicos, sociales, culturales y psicológicos. Los roles de género en la sociedad definen cómo actuar, hablar, vestirse y el comportamiento según el sexo del ser al nacer.
Así, la disforia se refiere a un desarreglo de las emociones en respuesta a acontecimientos vitales ordinarios de la existencia en la sociedad, además, es un rasgo de muchos trastornos psiquiátricos pero, no necesariamente biológico, cómo pretenden sostener los integrantes de los grupos DIVERSOS, al grado que plantean teorías cómo el que, el ser inmediato al nacer ya puede manifestarse si está o no, de acuerdo con su Identidad de Género.
En distintas épocas y sistemas políticos, según estudios, se ha mantenido una media estadística de lo que representan en el universo de razas, credos, edades, condición económica y social, etc. Es y ha sido esta, el que representan y han representado el 2% de la población total de la especie humana.
Resultados de la Investigación Littman
- El 36,8% de los niños tenían grupos de amigos en los que la mayoría se había identificado como transgénero.
- El 47,2% de los niños presentó un declive en la salud mental DESPUÉS de manifestar disforia de género.
- El 57,3% tuvo una disminución en la relación padre-hijo después de expresar disforia de género (DG).
- El 25% dejó de pasar tiempo con amigos no transgénero.
- El 49,4% trató de aislarse de sus familias.
- El 46,6% solo confiaba en la información de fuentes transgénero.
- El 60,0% de los grupos de amigos se burlaban de las personas que no eran transgénero.
Entran en estos grupos sociales para sentirse aceptados, y se burlan de ellos si se van.