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Por infanticidio piden excomulgar a Joe Biden

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Por infanticidio piden excomulgar a Joe Biden

Un llamado a los obispos de la Iglesia Católica estadounidense, para promover la excomunión al demócrata Joseph Robinette Biden Jr., o Joe Biden, hizo público el medio de prensa LifeSite.com, apoyándose en las declaraciones del Cardenal alemán, Gerhard Ludwing Müller, ex perfecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF) del Vaticano y presidente de la Comisión Ecclesia Dei.

El Cardenal, entrevistado en Roma, Italia, por Michel Haynes, coincidió con el llamado general a la acción pública al mundo cristiano por LifeSite, para que los obispos estadounidenses de la Iglesia Católica, excomulguen al presidente por su oficial posición proabortista o infanticidio.

En dicha entrevista, el Cardenal Gerhard Ludwing Müller, aseveró que “hay un gran dolor, especialmente entre los católicos americanos con el Presidente Joe Biden, que es católico, pero impulsa el aborto y quedó en evidencia con un llamado público a favor de este crimen, infanticidio”.

Joseph Robinette Biden Jr., o Joe Biden, de 81 años de edad, es el 46º presidente de los Estados Unidos de América y el segundo católico en ostentar el poder, después de Jhon F. Kennedy.

Para Müller “la palabra aborto es demasiado blanda. La realidad es matar, asesinar a un ser vivo e indefenso. No hay derecho a matar a otra persona. Va absolutamente en contra del Quinto Mandamiento, al promover y apoyar el asesinato de no nacidos y ancianos como en la época nazi -de la Segunda Guerra Mundial-. Es absolutamente inaceptable que puedas decir que eres católico y promover y justificar el asesinato de personas humanas, seres humanos desde el vientre materno, hasta la última respiración con la eutanasia. Es cinismo y cinismo absoluto de un nihilista y no entiende que un ser humano no tiene derecho a matar a otro, la matanza de sus propios hijos”.

La mentalidad pro aborto, dijo, “sostiene que sólo mi felicidad es importante, que es un criterio individual perverso de definición de la felicidad y el placer, por lo que la mentalidad proabortista de la felicidad individual es fundamentalmente contraria a la religión. Es absolutamente inaceptable que puedas decir que eres católico, es una concepción pagana y debemos rechazar abiertamente esta ideología absolutamente asesina”.

Agregó Müller, en dicha entrevista, “que la madre no tiene derecho a matar a su propio hijo, no habría base para ninguna moral, sería absolutamente el dominio de la brutalidad; la misión de una mujer y de una madre es proteger. ¿Dónde está el niño? No está en la casa del perro, está en tu vientre, en tu cuerpo dado como realidad por Dios, a través del amor”.

Una sola voz cristiana mundial

El cardenal Müller opinó que tal llamado y empeño serviría también para fortalecer una “conciencia y un movimiento mundial de católicos y cristianos. Los adversarios de la Iglesia tienen todo el poder de los medios de comunicación y detrás de ellos, están las organizaciones internacionales”.

Para Müller “el primer paso debe ser el identificar que hacer para que la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos de América, se pronuncie unánimemente; probablemente junto con otros religiosos cristianos, otros líderes religiosos, en una declaración absoluta, clara y firme de que el aborto va en contra de todas las normas y principios de la humanidad”.

“En esta y con absoluta claridad, expresar que todo aquel con responsabilidad pública que, como católico, esté promoviendo este infanticidio, que quede excomulgado. Biden y todas estas personas, deben saber que esto es un pecado mortal, incluso, si no lo están haciendo personalmente, sí como cooperadores directos de los asesinatos de personas inocentes”, argumentó Müller.

El Cardenal observó que, “aunque no exista un proceso formal de excomunión, no se puede excusar a una persona de la gravedad de sus actos al apoyar el aborto; no es posible que un ser humano tenga derecho a matar a otro. No transigir diciendo sí, es un presidente y no podemos hacer nada contra él. En otros tiempos gente así sería excomulgada, en otros tiempos los Papas y los obispos no tenían miedo a excomulgar, como San Ambrosio de Milán, que excomulgó al emperador católico Teodosio, porque mató en Tesalónica y a 7 mil inocentes en el teatro”.

“Él se levantó, también nosotros deberíamos levantarnos sin mirar las consecuencias para nosotros tenemos que abrir la boca por la gente inocente y proteger su vida. Nos orientamos en Jesucristo, el único camino, la Iglesia, el camino sinodal con Jesucristo, el camino, la verdad y la vida- y pedimos su bendición en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.”, concluyó Müller.

En el transcurso de la administración Biden, otras voces han tratado de hacerse escuchar sobre el tema. El pasado 7 del corriente mes, Matt Hadro publicó en el blog bioteca.com, bajo el título: “Biden y su política contradictoria de la enseñanza de la Iglesia”, una crítica contra sus políticas contrarias a las enseñanzas de la Iglesia Católica sobre la vida, el matrimonio y la sexualidad. Para él los obispos tienen el deber de abordar esta contradicción.

Sumó en su publicación la exposición de Chad Pecknold, profesor de teología en la Universidad Católica de América, quien expuso que los obispos deben tener claro dónde la administración de Biden entra en conflicto con la enseñanza de la Iglesia.

“Biden es casi un político perfecto a favor del aborto y sin embargo, afirma ser un católico devoto pero, su administración retiró a los Estados Unidos de América de la Declaración de Consenso de Ginebra, una declaración conjunta con otros 31 países que dicta que no existe el derecho internacional al aborto; también levantó una moratoria sobre la investigación financiada con fondos federales que utiliza tejido fetal derivado de abortos electivos”, espetó Pecknold.

Por aparte el Cardenal Luis Ladaria, prefecto de la CDF del Vaticano, sostiene que “la democracia sólo tiene éxito en la medida en que se base en una comprensión correcta de la persona humana. La participación católica en la vida política no puede comprometer este principio, porque de lo contrario el testimonio de la fe cristiana en el mundo, así como la unidad y coherencia interior de los fieles, serían inexistentes”.

LA NORMA VIOLADA POR JOE BIDEN

En los Estados Unidos de América, la iglesia Católica lidera con un 40.4% (30 millones de feligreses) seguida por las Iglesias Cristianas Sin Denominación, la Convención Bautista del Sur, la Iglesia Metodista Unida y los Testigos de Jehová, con un millón de feligreses cada una.

Su oposición al aborto se basa en la realidad de un acto a través del cual se da muerte a un ser humano inocente e indefenso, violando así la prohibición del asesinato. (CIC 2270-2272.) La CDF de 2004, afirmó que un político “que hace campaña y vota constantemente a favor de leyes permisivas del aborto y la eutanasia, manifiesta cooperación formal con el pecado grave y se le debe negar la Eucaristía. Además, el Canon 915 del Código Católico de Derecho Canónico, dice que no deben ser admitidos a la Sagrada Comunión quienes obstinadamente perseveran en pecado grave manifiesto”.

El Código de Derecho Canónico 915 también prohíbe explícitamente comulgar a los que están en pecado mortal: “No deben ser admitidos a la Sagrada Comunión los que hayan sido excomulgados o interdictos después de la imposición o declaración de la pena y los demás que perseveren obstinadamente en pecado grave manifiesto.”