Economía
Guatemala ajusta su proyección de crecimiento a 3.8% y depende de inversión para sostener el ritmo
Guatemala busca sostener crecimiento económico con más inversión y confianza.

El Banco de Guatemala (Banguat) reafirmó su proyección de crecimiento económico para 2025 en 3.8%, una cifra ajustada desde el 4% estimado previamente. La revisión responde, principalmente, a la desaceleración en Estados Unidos, principal socio comercial del país, cuya expectativa de crecimiento fue reducida por el Fondo Monetario Internacional (FMI) de 2.7% a 1.8%.
El gerente económico del Banguat, Johny Gramajo, explicó que Guatemala mantiene un crecimiento acumulado del 3.8% hasta abril de 2025 y, si no surgen factores externos adversos, cerrará el año con esa misma cifra. De concretarse, sería el cuarto año consecutivo que el país crece por encima de su potencial estimado, situado en 3.5%.
A pesar de la incertidumbre regional —marcada por el bajo desempeño de economías como México y Brasil— Guatemala se posiciona entre los pocos países que crecerán por encima de su potencial en 2025, según el FMI. No obstante, el Banguat advierte que el crecimiento sostenido solo será posible si se refuerzan la inversión en infraestructura, la estabilidad macroeconómica y la confianza de los inversionistas.
Inversión, el motor pendiente
Guatemala podría crecer a una tasa del 5% anual si logra aumentar su inversión del 16% actual del PIB a un 27%. Esto implicaría una inyección anual de US$7 mil millones durante cinco años, enfocada principalmente en infraestructura. De ese monto, un tercio podría ser inversión pública y el resto tendría que venir del sector privado. Para ello, es clave reformar la Ley de Alianzas Público-Privadas, señaló Gramajo.
El impacto de esta inversión sería notable: por cada dólar destinado a infraestructura, se estima un incremento de US$0.65 en el PIB. Además, tendría efectos multiplicadores en el empleo y en la reducción de la desigualdad.
Remesas en riesgo por nuevo impuesto
Otro factor que podría afectar el crecimiento es la eventual aprobación de un impuesto del 3.5% a las remesas en Estados Unidos, previsto para 2026. Si se implementa y los migrantes no logran absorberlo, las remesas podrían caer en US$860 millones, equivalente al 0.5% del PIB. Dado que para el 30% de los hogares beneficiarios las remesas representan su única fuente de ingreso, el impacto sería fuerte a nivel social.
Exportaciones y desafíos en el sector textil
Aunque las exportaciones crecieron un 11.2% hasta abril, el Banguat prevé que ese ritmo disminuirá. La proyección de crecimiento para 2025 fue reducida de 5% a 2%, debido a una base de comparación alta y a la incertidumbre generada por nuevos aranceles estadounidenses.
El sector de vestuario y textiles —uno de los más importantes del país— ya muestra caídas. Según Luis Óscar Estrada, director de VESTEX, las exportaciones disminuyen semanalmente ante la presión de compradores que exigen precios más bajos, absorción de aranceles y entregas más rápidas.
Panorama regional y oportunidades
Según Deloitte, el crecimiento económico regional también se ha ajustado a la baja, de 3.9% a 3.6%. Guatemala pasaría de 3.6% a 3.5%, siendo uno de los países menos afectados. Aun así, el entorno obliga a fortalecer sectores dinámicos como la construcción y los servicios financieros.
Deloitte identificó oportunidades de diversificación, ya que Guatemala solo representa el 4% de las importaciones de EE. UU., lo que deja espacio para crecer en nuevos nichos.