Guatemala cierra 2024 con la inflación más baja en 14 años: 1.7 %

La inflación en Guatemala cerró el año 2024 con un 1.7 %, la cifra más baja registrada en los últimos 14 años, según datos publicados este 7 de enero por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este resultado se encuentra incluso por debajo de las proyecciones oficiales, que estimaban un cierre cercano al 2 %.

El informe del INE destaca que este comportamiento inflacionario refleja una marcada desaceleración en el incremento de precios durante el segundo semestre del año. Comparado con 2023, cuando la inflación alcanzó el 4.18 %, y 2022, que registró un 9.24 %, la disminución es destacable. De hecho, la cifra de 2022 fue la más alta de los últimos 13 años.

Factores que explican la caída

Entre los principales factores que impulsaron la reducción de la inflación se encuentra la disminución en los precios internacionales del petróleo. El barril de crudo pasó de cotizarse en $83.25 en abril a $70.12 en diciembre, lo que generó un impacto positivo en los costos de producción y transporte a nivel nacional.

Además, los precios de productos esenciales como el maíz y el trigo se mantuvieron estables, lo que también contribuyó a aliviar las presiones inflacionarias. Esta estabilidad benefició no solo a Guatemala, sino también a países de la región como El Salvador, Costa Rica y Panamá.

El ministro de Finanzas, Jonathan Menkos, indicó que la estabilidad macroeconómica del país ha sido un factor clave para lograr este resultado. “Proyectamos que los precios se mantendrán relativamente estables en 2025, gracias a un entorno global de menores presiones inflacionarias y al buen desempeño de las exportaciones nacionales”, aseguró el funcionario.

Comparación internacional

En el contexto regional y global, Guatemala destacó por tener una de las tasas de inflación más bajas en 2024. Países como Bolivia (9.97 %), Honduras (3.88 %), y República Dominicana (3.35 %) registraron cifras significativamente más altas. Incluso Alemania, una economía desarrollada, cerró el año con una inflación de 2.6 %.